CONNIE

Un semestre completo y nunca puse atencion en ella, quiza porque los circulos de amigos eran muy diferentes, ella se juntaba con los rucos, una gordita y un skato, yo por mi parte preferia juntarme con aquellos que tenian las mismas inquietudes, es decir tipos que querian conocer muchachas lo cual era gracioso porque por lo general nunca estabamos juntos, siempre alguno o mas tuvo novia y preferia pasar las horas con su amada a beber y jugar en el billar, lo cual veo muy bien, valido y sobretodo preferente.

-Te voy a presentar a Connie- Me dijo mi mejor amigo.

-¿Y para que?-

-Pues porque dice que tu le gustas cabron, ¿que onda te avientas?-

-Bueno-

Y llego el momento de la presentación, fue uno de los momentos mas torpes de mi vida, de hecho tengo la firme creencia que Connie tenia una especie de poder mutante inhibidor de mi propio poder mutante para distorsionar la realidad porque la palabra mentira esta satanizada.

EPALE... ¿MENTIR? Si Señores(as) mios MENTIR, porque aunque muchos lo nieguen y otros no lo quieran aceptar el hombre tiene una capacidad innata para la mentira, de ahi que se acostumbre en nuestros circulos (mejor dicho en los mios) a ponerle el mote de "TOM" al mas mentiroso de nosotros (repito, dentro de mi circulo de amistades) y "TOM" proviene de el maestro del engaño Tom Ripley el celebre y encantador heroe de la saga conocida como "El Talentoso Mr. Ripley", "El Amigo Americano" o "La Mascara de Ripley" quien segun sus propias palabras su gran talento era decir mentiras, falsificar firmas, fingir voces entre otras bonitas actividades.

A mi mente llegan rapido las palabras de una mujer que con rabia y echando espumarajos, dijo alguna vez:

-A mi la mentira me agrede, me viola, me ultraja, la detesto, es ruin y despiadada, por eso me converti en abogada para... bla bla bla etc.

Pero ese es otro tema, la mentira (blanca) muchas veces es necesaria y yo la usaba en esos años para ocultar mi propia inexperiencia, mi timidez o mi falta de seguridad, pero con Connie nada de eso surgio, me puse tembloroso, mudo, parpadeante y gris.

Bendita ella que su gusto por mi le permitio tolerar el mojon de estupidez que tuvo enfrente cuando nos presentaron y es que la entrevista se dio mas o menos asi:

Despues de las presentaciones de rigor...

-Entonces... ¿vives cerca de aqui?-

-Si... por aqui... no muy lejos...-

-Y... ¿ya no andas con Samia ni Maribel verdad?-

-No... ya no... ya no ando-

-Mmmmmm... pues esta bien...-

-Si... esta bien... si...-

Luego creo que nos despedimos y cada quien se ocupo en sus cosas, Connie me imagino que fue corriendo emocionada a contarle a la gordita que era su amiga, yo por mi parte saque un cigarro y me dedique a contemplar el horizonte.

Nos hicimos novios por pura insistencia de las amistades que ansiaban vernos juntos, no importando si teniamos quimica o no, ella no era nada fea, de hecho era muy atractiva, tenia bonita sonrisa, se veia simpatica, muy alegre, buena onda pero... no se... nunca me senti muy atraido por ella, de ahi que no hubiera notado su presencia en el salon, los siguientes encuentros fueron igualmente funestos, platicabamos forzadamente unos cinco minutos y saliamos disparados a lugares opuestos.

Cuando mi amigo me convencio de declararle mi amor yo no estaba nada seguro, no me nacia decirle nada ni contarle mis famosas y graciosas aventuras, mucho menos jugar al conquistador ni nada de eso pero mi muy cabron amigo me dijo:

-No mames wey... pues si la traes muerta, nomas preguntale y veras como te dice que si-

Me convencio... una noche me fui caminando con ella y su grupo de amigos rumbo a la central de autobuses, poco a poco nos fuimos separando del grupo y en un parquecito clave del amor nos detuvimos y le dije:

-Connie... oye... mira... quiero decirte algo-

Me miro con una felicidad tal que me asusto.

-Oye... ¿quieres ser mi novia?- Era yo el ejemplo perfecto del tipico chamaquito vende peras.

-Ayyyyyy, claro que si ja ja ja ja ja ja- Se me colgo del cuello en un arrebato de increible alegria.

Nos besamos...


Sucedio algo terrible porque yo estaba muy acostumbrado a los besos franceses, ella tambien pero antes de mi tuvo un novio en el salon que le enseño a besar de una manera un tanto peculiar, muy extraña, muy incomoda y antinatura que consistia en dar los besos de forma vertical como lo hacen los peces cuando los ataca la pasion mas humeda y salvaje, yo por mi parte preferia el tipo clasico ladeando la cabeza, probando, mordiendo, succionando, suave luego un poco mas fuerte y ya en el climax hasta el jalon de greñas.

Ni en los besos estabamos conectados pero no importo mucho porque ella estaba contentisima y yo muy confundido, de hecho la abraze y seguimos nuestro camino hasta que alcanzamos al grupo de amigos ajenos, fue entonces que mi mejor amigo  nos vio, aplaudio, se acerco y me dijo frente a Connie:

-Oye wey... te voy a decir una cosa, es que la estas cagando bien cabron, yo conozco a Connie y si hay algo que le requeteencabrona es que la lleven del lado de la calle- Esto me lo dijo muy sonriente el desgraciado.

Me di cuenta de mi groseria y muy apurado, apenado y cagado cambie de lugar explicando que estaba muy emocionado porque ya eramos novios... etc, la verdad es que estaba muy concentrado ocultando lo que siempre me sucedia cuando tenia contacto fisico con una mujer, es decir, una tremenda y poderosa ereccion.

Bendita sea Connie que su gusto por mi incluso le permitio soportar la requeteencabronada de llevarla (sin querer) por el lado de la calle.

Nos despedimos, el grupo de amigos ajenos nos dio diez segundos para que nos besaramos a completo gusto, se dieron la vuelta y esperaron, Connie me miraba con su gran sonrisa y yo hecho un pendejo que no tenia una idea de que hacer, nos besamos terriblemente y me fui a mi casa a meditar lo ocurrido y a preguntarme ¿que chingados estoy haciendo?.

Continuara... (ahora si continuara con Connie)